Sunday, March 22, 2009

Voy de vuelta

ESta soy yo, atareada. sigo sacando fotos, quizas sin tanto afan, pero se me acumulan en mi escritorio de la compu de casa, porque no tengo tiempo.

pero también soy esta tratando en este momento de tanta intolernacia, de volver al principio, al barrio, como si fuera temperli.


Comenzamos la prueba piloto de separación de basura en la calle Cochabamba entre Bolivar y Perú.
La idea era probar una forma para que los cartoneros nos rompan las bolsas.

Después de preguntarle a varios cartoneros de la zona qué podemos hacer nosotros, los vecinos, para evitarlo nos dijeron que en lineas generales lo que buscan es PLASTICO, PAPEL Y CARTON y un minimo porcentaje tambièn busca comida. Para encontrarlos rompen las bolsas
La prueba, entonces, fue separar la basura asi, y hacerlos en bolsas transparentes para que se vea el contenido y no necesiten romperlas para saber qué hay.

El primer problema fue COMO HACERSELO SABER A LOS VECINOS DE ESA CUADRA.
Contamos con una de nuestras aliadas en Cochabamba, en un edificio de unos 20 departamentos.
Comenzamos yendo a nuestra calle piloto con bolsas transparentes tamaño entre bolsa de super y de consorcio, es decir grandes, y con unas fotocopias donde estaba la explicación de quienes somos y qué buscamos.
El primer problema fue que para algunos hablar con los vecinos, encararlos y explicarles era una traba. Hay personas tímidas que no tienen problemas en participar pero hablar con los vecinos desconocidos no les sale.
Tocar el timbre y hablar por el portero es casi imposible en estas epocas de inseguridad, asi que preferimos acercarnos a los vecinos que veiamos entrar o salir de alguna casa o edificio.
La primer reacción, en lineas generales, es la desconfianza. No es sencillo ponerse a hablar con cualquiera en esta època, creen que les vas a vender algo, o que te mandan del gobierno en el mejor de los casos.
POr suerte cuando nos identificamos como los que hicieron la baldeada en su puerta a fin de año es notorio como afloja el ceño, respiran hondo y dicen "ah! si, son ustedes".
Ahi podemos empezar a hablar, entregamos las bolsas y la fotocopia.
En la charla, el primer problema a superar es el NO inicial.
El primer comentario siempre es que va a fallar. Es la queja antes de siquiera empezar a hacer la prueba de mejorar algo: Siempre el problema va a ser que los cartoneros lo van a romper igual, que es una lucha contra los molinos de viento, que el problema es otro (los comercios, la feria, la recoleccion, el barrendero etc etc).
Sólo dos vecinos me dijeron que no lo harían: uno porque no tenia ganas y el otro porque no tenia espacio, porque la mujer lo iba a matar etc, pero con el correr de la charla concluyó que es mejor hacer la prueba antes para quejarse después.
Lo primero que queriamos ver en la prueba piloto es si los vecinos eran capaces de hacerlo.